AUTORA: JENNIFER L. ARMENTROUT
SERIE: SAGA COVENANT #0
EDITORIAL: KIWI
PÁGINAS: 61
SINOPSIS
Durante tres años, Alexandria ha vivido entre mortales, intentando ser como ellos y tratando de olvidar la misión que debía cumplir por ser una hija de un mortal y un semidios. Con diecisiete años ha aceptado ya que es algo fuera de lo común para los estándares mortales… y que nunca estará preparada para su misión.
Según su madre, es algo bueno.
Pero como cada descendiente de los dioses sabe, el Destino no es algo de lo que te puedas librar. Un ataque horrible fuerza a Álex a volar a Miami para intentar encontrar la forma de volver al lugar que su madre avisó de que nunca debía volver —el Covenant.
Cada paso que la acerca a la seguridad es un paso más hacia la muerte… porque la persiguen aquellas criaturas para las que fue entrenada para matar.
Los daimons la han encontrado.
TÍTULO: MESTIZA
AUTORA: JENNIFER L. ARMENTROUT
SERIE: SAGA COVENANT #1
EDITORIAL: KIWI
PÁGINAS: 354
SINOPSIS
¿Serías capaz de matar a quien amas?
Los Hematoi provienen de la unión entre dioses y mortales; y los hijos de dos Hematois de sangre pura tienen poderes divinos. En cambio, los hijos de Hematois y mortales, no. Los mestizos solo tienen dos opciones: entrenar para ser centinelas, cazando y matando Daimons, o convertirse en sirvientes en las casas de los puros. Alexandria prefiere arriesgar su vida luchando antes que limpiar retretes, aunque de todas formas, puede que termine en los barrios bajos.
Hay reglas muy estrictas que los estudiantes del Covenant deben seguir. Álex tiene problemas con todas, pero especialmente con la regla número 1:
«Las relaciones entre pura sangre y mestizos están prohibidas».
Por desgracia, Álex se siente atraída por Aiden, un pura sangre irresistible. Aunque enamorarse de Aiden no es su mayor problema; mantenerse viva hasta su graduación en el Covenant y llegar a ser centinela sí lo es. Si no cumple con su deber, se enfrentará a un futuro peor que la muerte o la esclavitud: se convertirá en un Daimon y Aiden será su cazador.
Y eso, no es nada bueno.